En poco más de un siglo, la ciudad y el llano de Barcelona experimentaron un espectacular crecimiento urbano que transformó profundamente su morfología y su paisaje. Para gestionar todos estos cambios espaciales, la administración necesitó elaborar mapas: mapas para diseñar proyectos como los nuevos planes urbanísticos, la ampliación y mejora de la red viaria, el abastecimiento de agua, la construcción de una moderna red de alcantarillado o la creación de parques urbanos. Un conjunto de transformaciones para las cuales la elaboración de cartografía se volvió imprescindible.

El marco temporal de la exposición se extiende hasta el año 1925, fecha en la que se creó, dentro del Ayuntamiento de Barcelona, la Oficina del Plan de la Ciudad, organismo encargado desde entonces de elaborar los mapas necesarios para la gestión municipal.

La exposición podrá visitarse hasta el 28 de febrero de 2026.

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