Decálogo de medidas de seguridad y buenos hábitos | icgc

Decálogo de medidas de seguridad y buenos hábitos

Decálogo de medidas de seguridad y buenos hábitos para montañeros en terrenos con peligro de aludes

1. Prepara la salida

Todos los miembros deben saber qué aludes se prevén, localización y tamaño, indicados en el boletín de peligro de aludes. Es necesario que identifiques tanto en el mapa como en tu cabeza los lugares críticos donde se tendrá que decidir. Prepara un plan B conservador.

2. Lleva y sepas utilizar adecuadamente el DVA (Detector de Víctimas de Aludes), Pala y Sonda

Haz el control del DVA de todo el grupo. Si alguien no lo lleva o le falla no puede realizar la salida. Hay que estar bien entrenado en el uso de todo el material de seguridad: DVA, pala y sonda. Se recomienda valorar la adquisición de otro material de seguridad (Avalung, mochila ABS, emisora, etc.).

3. Usa material seguro

No lleves material que sirva de anclaje en caso de susceptibilidad de sufrir un alud: dragoneras puestas y correas. Se pueden sustituir las correas por frenos y las dragoneras se pueden llevar sin poner.

4. Traza siempre por el sitio más seguro

Si es necesario, abre tu propia traza evitando confiar en el criterio de desconocidos.

5. No expongas nunca a todo el grupo al mismo tiempo

En pendientes de más de 30º esquía de uno en uno manteniendo contacto visual. Reúne al grupo siempre en lugar seguro, lejos de pendientes que puedan dar lugar a aludes. Adapta tu comportamiento a las condiciones de la nieve.

6. Ten presente siempre las consecuencias

Hay que tener mucha experiencia para valorar la estabilidad de la nieve pero no para valorar las consecuencias. Sé previsor y valora siempre qué pasará en caso de que se produzca un alud en el lugar y en el momento en el que te encuentras.

7. Re-evalúa constantemente tus decisiones

Valora siempre qué está cambiando del terreno, a la nieve y al grupo (incluido tú mismo) mientras circuláis por terreno innivado.

8. Mantén una buena comunicación dentro del grupo

Hay que crear un ambiente de buena comunicación: hablar pero también e igualmente importante escuchar. Sólo así estaremos al tanto de lo que nos preocupa o inquieta a todos, desde el más inexperto al más experimentado.

9. Fórmate e infórmate

Siempre hay cosas nuevas a aprender y nuevas experiencias a compartir. Nunca se es lo suficientemente experto.

10. Sé conservador

En tus decisiones contempla un margen amplio a la incertidumbre. Las montañas no se moverán de lugar e incluso la nieve puede estar mejor otro día.